Entre la nada y el todo… me quede inmóvil, y nadie me dijo nada… ni vos, es obvio.
Tu silencio duro días, demasiados, pensé en vos y te soñé… me decías nada, no podía comprenderte…
Anoche soñé con ella, con sus ojos verdes, con su pelo casi naranja, con su carita inmutable… con todo lo que es… o era, no lo se. La gente tiende a cambiar.
No entiendo por que, no se que tenía que ver ella en mi vida onírica… ¿podes responderme?, claro que no… vos nunca sabes nada.
Hoy me mandaste un mensaje, me contaste que seguías respirando y también, como siempre me pediste algo… estoy completamente segura que si no me necesitabas, no ibas a avisarme que llegaste.
Por un lado no me gustó no poder ayudarte, pero por otro lado ¿Qué importa?...
Todavía quiero saber de su presencia en mis sueños… lo recuerdo y aún me hace feliz… dicen que los sueños son deseos de la vida despierta, de esos que no se pueden cumplir… pero, ¿Qué deseo mío podía implicarla a ella?...
Respondeme!
Claro que nunca vas a decir nada, no me escuchas cuando te hablo.
Quizás mas tarde tenga respuesta, por ahora… me dirijo al mismo lugar en donde anoche la vi…
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